Tipos de encuadernación

Es un método económico de encuadernación que consiste en colocar las hojas cortadas sueltas (es decir, sin necesidad de estar plegadas en cuadernillos) formando bloques, se hace una fila de agujeros en el lado del lomo y se pasa un espiral de alambre o de plástico por estos orificios. 

Características:

• Permite encuadernar desde pocas a una gran cantidad de hojas.
• Las hojas quedarán en plano una vez abierto el libro.
• No requiere maquetar en múltiplos de 4 páginas.
• Posibilidad de elegir entre varios colores de espirales.
• Lo recomendamos para libretas, manuales o calendarios.

Se trata de un método similar al gusanillo, con la diferencia de que en este caso el alambre es doble. Esto permite que el acabado tenga mayor resistencia y, por tanto, se mantenga una estética más cuidada a lo largo de la vida útil del impreso.

Características:

• Permite encuadernar desde pocas a una gran cantidad de hojas.
• Las hojas quedarán en plano una vez abierto el libro.
• No requiere maquetar en múltiplos de 4 páginas.
• Posibilidad de elegir entre varios colores de alambre.
• Lo recomendamos para libretas, manuales o calendarios de uso intensivo.

Si estás buscando una solución de encuadernación rápida, sencilla, duradera y muy económica para un proyecto que no incluya muchas páginas, la grapa será tu mejor aliada.

Se trata de una encuadernación a caballete, es decir, que grapamos el cuadernillo a lo largo de lomo, uniendo todos los pliegos entre sí. 

Características:

• Método rápido, ya que los tiempos de producción son muy cortos.
• Económico.
• Permite dejar las hojas en plano una vez abierto, lo que facilita tanto la lectura como la visualización de fotos que vayan de página a página.
• No permite encuadernar un gran número de páginas .
• Posibilidad de hacer el lomo cuadrado.
• Existe la opción de optar por las Grapas Omega, cuya forma (Ω), permite incluir el impreso posteriormente en una carpeta de anillas.
• Lo recomendamos para revistas, catálogos, libretas y folletos.

La característica principal de esta encuadernación, conocida como rústica o de tapa blanda, es que las páginas interiores del libro serán unidas a la cubierta mediante el pegamento que se aplica en el lomo.

Existen varios tipos de acabado en esta técnica:

Rústica fresada: Las hojas van sueltas, sin formar cuadernillos, se alzan (es decir, se coleccionan en orden) y una vez alineadas, se realizan unas pequeñas incisiones en el lado que será el lomo. Estos pequeños huecos permiten mayor penetración del adhesivo (generalmente cola EVA), sobre el que finalmente se añadirá la cubierta. Este tipo de encuadernación es conocida también como “encuadernación a la americana”.

Rústica PUR: La veremos desglosada en el siguiente apartado.

Rústica cosida: Las hojas se pliegan en cuadernillos que serán cosidos entre sí para formar las tripas del libro. Posteriormente se aplica el adhesivo en el lomo y se pegan las cubiertas. Es la modalidad de encuadernación rústica más resistente y duradera, también la más aconsejada para volúmenes medios y altos de número de páginas.

Esta encuadernación es una evolución de la rústica fresada, ya que emplea el mismo procedimiento, pero cambiando la cola tradicional por PUR (poliuretano reactivo).

Características:

• La cola PUR tiene más flexibilidad, lo que mejora la vida útil del producto al desgastarse menos el lomo.
• Reduce el tiempo de producción respecto a la rústica cosida, ya que se trata de una técnica sencilla y de ejecución mecanizada.
• En comparación con el adhesivo tradicional, la cola PUR tiene más resistencia a la extracción de páginas. De hecho, es casi imposible arrancar una página de un libro encuadernado con adhesivo PUR.
• La cola PUR es compatible con muchos materiales, lo que permite jugar con portadas distintas al papel o la cartulina.
• Mantiene sus propiedades en un amplio espectro de temperaturas, por lo que no se cuartea o derrite con el paso del tiempo.
• Se necesita menos cantidad en cada ejemplar que con la cola tradicional. Ese menor pegamento significa menos distorsión de la forma del lomo, lo que resulta en una apariencia nítida y cuadrada, incluso en los libros con el lomo más delgado.
• Recomendado para catálogos, libros o manuales.

A medio camino entre la encuadernación rústica y la tapa dura, el sistema flexibook consiste en una cartulina de alto gramaje forrada con papel o tela. 

La maleabilidad del producto final es su característica principal, ya que se configura igual que un libro de tapa dura, pero sin ponerle el cartón rígido.

Sin duda, la encuadernación en tapa dura es la que mayor prestancia da a una obra, a diferencia de la encuadernación en rústica la cubierta no es solamente un papel de mayor grosor, sino que está formada por diversos elementos: un cartón rígido forrado por una lámina impresa, que se une a los pliegos interiores por unos dípticos llamados guardas. 

Características:

• El coste es más elevado que en todas las otras opciones de encuadernación, debido a la cantidad de procesos y materiales que conlleva.
• Se caracteriza por su resistencia y durabilidad en el paso del tiempo.
• En tomos de muchas páginas, es la opción más indicada, ya que si no los lomos acabarán cediendo en otros estilos de encuadernación.
• Lo recomendamos para libros y catálogos.

En encuadernaciones cosidas podemos encontrar procesos semi-automatizados (cosido Singer) o procesos plenamente manuales, como la encuadernación japonesa.

Características:

• No permite encuadernar un gran número de páginas .
• En el caso de los cosidos manuales, el precio sube porque el volumen de producción a la hora no es tan alto como en los cosidos mecanizados.
• Lo recomendamos para catálogos, libretas y folletos que quieran tener un toque distintivo.