¿Por qué se inventa la Comic Sans?
En 1993, Microsoft estaba finalizando un programa llamado Microsoft Bob que iba a ayudar a los nuevos usuarios a navegar por su próximo sistema operativo Windows 95. El software transformaba la pantalla del ordenador en un salón hogareño, de forma que haciendo click en cierto elementos tenías una experiencia de usuario más intuitiva: haga clic en el lápiz y el papel para abrir el procesador de textos, click en el reloj para abrir el calendario….
El que guiaba a los usuarios en esta simulación era un perro (el precursor del archifamoso Clippy), cuyos bocadillos estaban escritos en Times New Roman. Vincent Connare, miembro del equipo de tipografía de Microsoft, se sorprendió y dijo una de esas frases que sólo un diseñador puede decir sin miedo a cómo suene: “¡Los perros no hablan en Times New Roman!”
Así que para evitar tremenda tragedia, decidió crear una nueva tipografía basada en letras de cómics y más acorde a cómo hablan los canes. Con Watchmen y Batman como inspiración, Connare dibujó cada letra en su pantalla en un proceso que le llevó solo tres días. Quería que la Comic Sans fuera amigable y accesible, con un aire de lo que él describe como “torpe” (dixit).
A pesar de los esfuerzos de Connare, el diseño de Comic Sans se finalizó demasiado tarde para Microsoft Bob. Y ahí empezó el principio del fin. Cuando se lanzó Windows 95 al año siguiente, Comic Sans fue aprovechada e incluida como una de las fuentes del sistema.
Los fallos en el diseño de la Comic Sans
Así que la historia de Comic Sans no es tanto la de una tipografía terrible, sino la de una fuente mediocre, usada incorrectamente a gran escala. Windows 95 fue el primer sistema operativo en tener éxito a gran escala, de ahí que la Comic Sans estuviera por todas partes.
Parte de la razón por la que Comic Sans es tan poco atractiva en un entorno profesional es su irregularidad. Por ejemplo, a diferencia de la mayoría de los tipos de letra, las letras como la “b” y la “d” no son idénticas. Y eso, para la mayoría de las personas, significa que también es más difícil de leer.
Pero por otro lado, para las personas con dislexia, la situación se invierte por completo. Las letras irregulares facilitan la lectura, ya que los caracteres son más fáciles de distinguir entre sí. Hoy en día, varias asociaciones nacionales de dislexia incluyen Comic Sans como fuente recomendada.
Ante todos los haters y trolls de esta tipografía, nació un club de defensa en Tumblr (¡ay, Tumblr!) llamado Comic Sans Project cuyo lema era el siguiente (por cierto, suyas son las adaptaciones de famosos logos que veis abajo):
“WE ARE THE COMIC SANS DEFENDERS. WE FEAR NO FONTS AND WE WILL MAKE THE WHOLE WORLD COMIC SANS. BECAUSE HELVETICA IS SOOO 2011”
¿Sabías que…?
Vincent Connare diseñó otras de las legendarias tipografías de Microsoft, como Trebuchet MS y parte de Webdings.
