La ciencia detrás del olor de un libro antiguo
En el estudio de 2009 publicado por esta universidad londinense y liderado por Strlic (Material Degradomics: On the Smell of Old Books), extrajeron estos compuestos volátiles de una novela francesa de 1928 que encontraron en una librería de segunda mano.
Olor a vainilla, chocolate, café...
Los voluntarios olieron ciegamente extractos del libro, además de otros siete aromas sin etiquetar que van desde el chocolate y el café hasta el mercado de pescado y la ropa sucia.
Al tener que describir posteriormente ese olor, más de un tercio de los participantes indicó que el extracto de libro antiguo les recordaba a chocolate y a café.
En Compound Interest nos cuentan cómo el benzaldehído es el que crea los toques de almendra, mientras que la vainillina emite notas de vainilla. Los olores dulces provienen del tolueno y el etilbenceno, mientras que el 2-etil hexanol produce una ligera fragancia floral.
Además, el libro también puede retener algunos olores a los que haya estado expuesto durante su historia, como humo, daños por agua o flores prensadas entre las páginas.
¿Sabías que…?
Otros compuestos emitidos se emplean para determinar la antigüedad de un libro. El furfural es uno de ellos. Cuanto más furfural emite un libro, más antiguo es su año de publicación.